ALQUIMIA
Podríamos definir la Alquimia como el Arte de la Transmutación. El origen etimológico de la palabra no está claro.
Se piensa que los inicios de esta ciencia fue en el antiguo Egipto aunque se cree que su origen fue mucho anterior.
El alquimista (o filósofo) busca la piedra filosofal para transmutar “el plomo en oro” o hallar la más alta medicina.
La Alquimia posee un conocimiento que proviene del Hermetismo cuya base son las Leyes Naturales que rigen a toda la creación.
Son compartidas en todos los Alquimistas las ideas que: todo procede del Uno y retorna a Él, que toda materia evoluciona a su mejor versión, y que en su interior subyace la chispa divina o espíritu del mundo, el cual es susceptible de ser atrapado mediante altas y secretas operaciones alquímicas.
En la formación se aprenderá sobre la elaboración y uso de elixires alquímicos que acompañarán los distintos procesos que se abran a lo largo del curso, aportando consciencia a los aspectos que deban ser trascendidos por el alumno, ya sea a nivel físico, emocional, mental, energético o espiritual, a medida que se van traspasando las tres grandes puertas de toda obra alquímica: Nigredo, Albedo y Rubedo.
Estudio de las Leyes Naturales que rigen al ser humano, con el fin de alcanzar un estado de paz interior a la vez que realizamos nuestro propósito, el cual dio lugar a nuestra existencia.